sust. masc.
1) Filosofía. Tendencia a afirmar la existencia objetiva de los universales. En este sentido equivale a idealismo y se opone a nominalismo. Estas denominaciones, de gran uso en la Edad Media, se han renovado en el pensamiento contemporáneo.
2) Término con el cual se suele designar cualquier orientación estilística que persiga la estrecha adhesión de la forma artística con los aspectos de lo real. Se habla de realismo a propósito de los retratos realizados por los escultores romanos de la época imperial y en relación con las figuras de Wiligelmo y de Antelami se subraya el esfuerzo realista como concreción de la fantasía religiosa medieval. Solo en la segunda mitad del siglo XIX después de la polémica de Baudelaire contra el sentimentalismo tardío de la pintura se empezó a hablar de manera específica de realismo. A partir de esta crisis los artistas dispuestos a "describir" el mundo no pudieron abstenerse de un compromiso de "verdad". Las izquierdas radicales y el marxismo, situaban en el centro de sus estéticas la hipótesis del realismo, como forma de arte proletario y progresista. Como resultado de las críticas que T.W. Adorno y W. Benjamin dirigieron a Lukács una hipoteca de contenido siguió gravitando sobre el concepto de realismo, que se intentó elaborar en el campo del marxismo de 1930 a 1950. Un significado de protesta general es también característico en aquellos movimientos que han retomado formas de realismo: en EUA, el pop art, y el llamado hiperrealismo, que renuncia a cualquier interpretación de la realidad.
3) Conducta o manera de ser del que se atiene a los medios más que a los principios o razones, en oposición a idealismo.
sust. masc.
1) Doctrina u opinión favorable a la monarquía. En España se dijo con aplicación a la pura o absoluta.
2) Partido que profesa esta doctrina.